La celiaquía nos obliga a llevar una dieta estricta sin gluten. Y estricta significa estricta, sin excepciones. A veces esto puede ser todo un reto, especialmente si comemos fuera de casa 🏠
Salir a comer a un sitio 100% gluten free nos da plena seguridad, pero a veces, también nos apetece probar otros sitios que ofrezcan platos aptos y cuiden la contaminación cruzada. Llámanos curiosos, o disfrutones, o foodporneros 😋
Vaya de antemano que ya es todo un logro atrevernos a salir, por muy surrealista que suene. Cierto es que los profesionales de la hostelería harán todo lo posible para cuidar los detalles y que tú puedas disfrutar de tu plan sin trazas, pero en cocinas donde no son 100% sin gluten, siempre hay un mínimo riesgo de contaminación cruzada.
En el primer turno te atenderán mejor y podrán controlar mejor la contaminación cruzada.
Y aquí nos vuelve a venir la cabeza lo de “dieta estricta sin gluten”. La gestión de la celiaquía nos obliga a minimizar los riesgos al máximo, porque si no… ciao ciao al planazo que tenías montado 👋
Así que cuando vayas a comer fuera a un sitio que no es 100% libre de gluten intenta siempre ir al primer turno. Eso permitirá que los hosteleros puedan atenderte mejor, en cocina podrán concentrarse mejor en tus necesidades, habrá mayor limpieza a la hora de preparar tus platos y no habrá follón ni confusión con el resto de comandas con gluten.
No lo vamos a negar. El primer turno puede provocarte síndrome de guiri o de niña de 4 años. Pero tiene sus ventajas: el tardeo o la noche son más largos 😉